El enoturismo continua en auge, en 6 años las visitas turísticas a bodegas ha aumentado un 40%, y en 2013 aumentó un 18,08% respecto a 2012.
Los españoles este año estamos viajando más, pero con cierta prudencia, quedándonos en España y gastando menos en nuestros viajes, quizá por este motivo el enoturismo no para de crecer puesto que se tratan de bodegas nacionales, así pues no son necesarias unas largas ni costosas vacaciones.
Las rutas vinícolas donde más aumentado el número de turistas son dos, la ruta del vino y brandy del Marco de Jerez y la ruta del vino y el cava Enoturisme Penedès. Ambas son zonas cercanas a la costa a las que acudir en Ave, con los más baratos billetes Ave Sevilla y billetes Ave Barcelona.
También han alcanzado muy buenas cifras de turistas las rutas de la Rioja Alavesa, Rioja Alta, Ribera del Duero y Rías Baixas.
Las temporadas más proclives para practicar enoturismo son otoño y primavera (mayo, junio, septiembre y octubre) Un buen empuje al turismo desestacionalizado.
El turista que basa sus vacaciones en las rutas enológicas de España es un turista nacional, de entre 40 y 60 años, aunque cada vez la media de edad del enoturista va bajando. El 70% de los enoturistas de España son españoles, los más aficionados al enoturismo son los catalanes (24,55%) y los valencianos (15,88%), tras estos, los andaluces (14,08%) y los castellanoleoneses (9,66%).
Los europeos más enoturistas son los alemanes (8,20%), y está creciendo el número de estadounidenses aficionados a las rutas del vino (3,5%). A estos, les siguen los británicos (2,80%)
En todos los casos, las reservas de viajes para visitar las mejores bodegas españolas a través de Internet están creciendo.
Y enoturismo y gastronomía van de la mano, habitualmente el turista aficionado al vino también lo es al gastroturismo y viceversa.
En 2013 y lo que llevamos de 2014 las bodegas están obteniendo el mayor incremento en turistas desde 2009, y aunque debido a la crisis, en el año 2012 menos turistas debido a que los españoles apenas tuvieron viajes de ocio ese año, el enoturismo no se hunde si no que continúa siendo una tendencia al alza en turismo nacional.